Probablemente
nunca juegue un Mundial. La única Copa del Mundo que ha disputado su
país fue en Francia 1938 y porque fueron invitados a participar, pero
es aún peor que muy posiblemente nunca más pueda vestir la camiseta de
su país, al menos en la situación actual, ya que la Federación de
Fútbol de Cuba ni olvida ni perdona la decisión de Osvaldo Alonso
(11-11-1985) de desertar de su país y de su selección en el año 2007,
en búsqueda de un futuro que él consideraba que no lo tendría de
continuar en la isla.
La principal
característica de la denominada “Ley de ajuste Cubano”, la constituye
el hecho de que si un cubano pisa suelo estadounidense, en un año y un
día se convierte, de pleno derecho, en residente de ese país, y eso es
lo que le ha ocurrido a Osvaldo Alonso.
Tímido pero agradable en el trato, Osvaldo Alonso acude a su cita con MARCA.com.
“¿Mi sueño?, dice tímidamente, “volver a vestir la camiseta del equipo
nacional de Cuba”, afirma el mejor futbolista cubano en la actualidad.
No fue fácil.
En 2007, unos meses antes de que se disputara la Copa Oro en Estados
Unidos, Osvaldo Alonso esbozaba su plan. No tenía mucha información,
pero sí contaba con la convicción de querer mejorar su vida. “Lo tenía
todo preparado desde Cuba. Tenía claro que quería quedarme en Estados
Unidos”.
Así, nuestro
protagonista decidió, antes disputar el último partido de grupo frente
a Honduras, abandonar la concentración de la selección cubana, con el
objetivo de convertirse en lo que es hoy, ciudadano estadounidense.
“Supuso dejar atrás todo; mi país, mi familia, mis amigos... Fue una
decisión muy dura, pero estaba seguro de que lo que hacía era lo
correcto. La vida ha demostrado que hice lo correcto y no me
arrepiento.”
“La vida en
Cuba es muy complicada” y si eres futbolista quizás sea peor aún. “En
mi país no hay tradición y recursos para el fútbol. Todos van para
otros deportes más populares como el béisbol. Además, todos conocemos
la realidad de la isla…”
Desertando de
la selección cubana, Osvaldo Alonso dejó también atrás el FC Pinar del
Río, el equipo donde jugaba en la Isla, para pasar a formar parte del
Charleston Battery del Sur de Carolina donde destacó desde el primer
día y se convirtió en el jugador revelación de la USL Professional
División, otra liga con menor relevancia que la MLS.
Sus logros le
condujeron a Seatle Sounders y, desde entonces, Osvaldo Alonso es el
pulmón más importante del equipo, un mediocentro defensivo recuperador
por excelencia. “Mi ídolo era Zinedine Zidane y me gusta mucho Xavi,
pero creo que soy más como (Claude) Makelele”, dice sonriendo.
La MLS puede
ser una liga relativamente nueva, pero con la buena organización que
tiene no extrañan las buenas palabras de nuestro entrevistado; “Desde
el principio me han tratado de manera increíble. Esta liga me ha
permitido crecer y progresar en el fútbol y también como ser humano”.
Además, Alonso no juega en un equipo cualquiera de la MLS. Viste la
camiseta del equipo con la mejor afición y eso supone un compromiso
extra. “Sin duda es la mejor afición de la MLS. Llenan el estadio, no
dejan de animar, ¡es algo increíble! Los partidos se viven con mucha
pasión; parece que estás en Inglaterra”.
Los buenos
momentos no hacen que Alonso pierda la perspectiva de lo que realmente
le gusta. No ha vuelto a Cuba desde 2007, sencillamente porque no
puede. “Echo de menos el calor y la alegría de la gente. Aquí la gente
es más fría. También extraño la música y la comida cubana”.
El trabajo
que supuso para Osvaldo Alonso abandonar la selección cubana hoy tiene
recompensa. No es que haya muchos futbolistas cubanos, pero se puede
decir que en la actualidad Osvaldo Alonso es el mejor futbolista
cubano, aunque su país no vaya a sacar provecho de esta circunstancia.
Tomado del Blog del Fútbol CUbano
