Su físico actual tiene mucho en común con dos grandes delanteros de
su mismo corte, incluso algunas veces, medio en broma medio en serio, le
dicen Balotelli o Adebayor, salvando las distancias, pues Maykel Reyes
es un delantero de Viñales, no de Italia o Togo, representa a Pinar del
Río y a Cuba, y aunque su calidad en estos momentos diste mucho de
estrellas de ese calibre para nosotros es simplemente un goleador
diferente.
Este muchacho que peina un yonkee muy a la moda, explota su rapidez
en cada oportunidad, que al mezclarla con una técnica que pocos arietes
en Cuba se dan el lujo de exhibir, le brinda posibilidades de ver puerta
contraria a menudo, y por eso es el eje del ataque tanto en Pinar del
Río como en la selección nacional sub-20.
"Es algo natural en mí, me gusta encarar los defensas y anotar, pero
también disfruto cuando participo en el juego del equipo, la asociación
con el resto de los compañeros es vital para la victoria, dar una
asistencia, hacer un buen desmarque con un pique a la banda, todo es
importante, por eso sigo mucho al FC Barcelona y tengo como ídolos a
Ronaldinho y Messi, dos cracks", dice Maykel que cumplió 20 años el
pasado cuatro de marzo.
Algo de esa sinergia pudimos comprobar con el equipo nacional que
clasificó hace poco para el Mundial sub-20 Turquía 2013, hecho inédito
en la historia del fútbol cubano, incluso casi todos los jugadores
usaron el mismo peinado.
"No fue algo planificado ni mucho menos, cuando nos dimos cuenta ya
teníamos el corte hecho casi todos, nos gustó y decidimos mantenerlo
así, para que supieran que éramos un equipo compacto, esa y no otra fue
la clave de la clasificación", explica el delantero cubano.
El partido de cuartos de final ante Costa Rica parecía complicado de
antemano y aunque el resultado favorable de dos-uno indica paridad, el
partido realmente lo dominó Cuba.
"Desde que salimos de aquí sabíamos que ese y no otro era nuestro
juego, y quizás por eso al principio la ansiedad nos jugó una mala
pasada, pero una vez avanzaron los minutos logramos llevar el juego a
nuestro terreno y ya nunca lo dejamos escapar de la mano; al final la
alegría fue tremenda, imaginen lo importante que es asistir a un
mundial", nos cuenta emocionado.
Enfrentar a selecciones europeas y sudamericanas es un reto enorme,
también a las africanas que son durísimas en esta categoría: ¿qué hacer
entonces? "Tenemos que mejorar nuestro pensamiento táctico, topar más
con ese nivel, y también pienso que físicamente podemos desarrollar más
nuestro cuerpo, sobre todo yo, que tengo que chocar con centrales altos y
fuertes. No obstante, confío en que podemos sorprender, con este equipo
no hay nada dicho hasta el minuto 90", vaticina.
Maykel mide 1.83 centímetros y pesa 71 kilogramos, en un rango
aceptable para el plano doméstico pero inferior a los estándares
internacionales, donde en el fútbol todo es a nivel ultraprofesional,
hasta el más mínimo detalle.
"Debemos hacer muchas cosas, y de las que están en nuestras manos hay
que hablar de las canchas, pues están en malas condiciones en casi todo
el país, con excepción de la de Zulueta; con ello podemos resolver
infinidad de cuestiones directas en el fútbol como son la técnica, la
salud de los jugadores y por supuesto, el espectáculo en sentido
general", indica.
En estos momentos el joven atacante vueltabajero está concentrado con
la selección nacional de su categoría que pronto partirá a Sudamérica
para topar con clubes de Brasil y Argentina.
Maykel mantiene su mente ocupada en el equipo y en los ratos libres
escucha un poco de reguetón y música romántica, comparte con los amigos y
con su novia.
Por lo pronto espera regalarnos otra sorpresa y sigue de cerca a su
equipo pinareño, que marcha segundo en el 98 Campeonato Nacional con 17
puntos tras vencer el miércoles al líder Camagüey.
"Ahí están varios de mis amigos...Yampier, que también es viñalero y
mucho me aconsejó en cada momento, ojalá yo pudiera aportar más, por
ahora defiendo al Cuba, y como te dije anteriormente, hasta el '90 no
hay nada dicho".
Tomado del Blog del Fútbol CUbano